Albóndigas de bacalao a la vizcaína
Saborea unas albóndigas de bacalao a la vizcaína con un sabor y textura inigualables. Hechas con ingredientes frescos y una salsa hecha a base de tomate, cebolla y pimentón, esta receta tradicional vasca te sorprenderá por su sabor intenso y aromático.
Sirve las albóndigas en una cazuela de barro para una presentación auténtica y deliciosa, y disfruta de una comida excepcional.
Los imprescindibles para tus albóndigas
Embárcate en el viaje de sabores que te proponen estas albóndigas de bacalao a la vizcaína, y para ello, asegúrate de tener a mano estos ingredientes fundamentales.
- Bacalao – Opta por un pescado que al desmenuzarlo con los dedos, se sienta firme y jugoso. Si el tiempo apremia, hay versiones desaladas que son un excelente plan B.
- Pan rallado casero – Créeme, una vez que pruebes a hacerlo y sientas cómo aporta esa textura crujiente y casera a tus preparaciones, no querrás volver atrás.
- Huevos de corral – Son el alma que da cohesión a nuestra mezcla. Busca huevos con la yema vibrante, signo inequívoco de frescura y calidad.
- Ajo y perejil fresco – El dúo dinámico que nunca falla. El ajo debe picarse hasta que casi desaparezca entre los dedos, y el perejil, siempre fresco, como si acabara de ser arrancado del huerto.
- Salsa vizcaína auténtica – No escatimes en la calidad de los tomates y cebollas; deben ser de esos que al cortarlos desprenden todo su aroma. Los pimientos choriceros son esenciales, son el corazón de esta mezcla con carácter.
Preparación de las albóndigas
¡Manos a la obra! Sigue estos pasos y consejos para preparar las deliciosas albóndigas de bacalao a la vizcaína:
- Rehidrata el bacalao siguiendo las instrucciones del paquete. ¡No te saltes este paso, es esencial para el sabor y la textura de las albóndigas! Si no tienes tiempo, puedes utilizar pescado desalado.
- Mezcla el bacalao desmenuzado con pan rallado casero, huevos, ajo picado y perejil fresco. El pan rallado casero le dará una textura crujiente y única.
- Forma las albóndigas con las manos, dándoles una forma redonda y compacta. ¡Asegúrate de que queden bien compactadas para que no se deshagan durante la cocción! Si quieres darle un toque extra de sabor, puedes enharinarlas ligeramente antes de freírlas.
Elaboración de la salsa vizcaína
La salsa vizcaína es el corazón de esta receta tradicional vasca. ¡Sigue estos pasos y triunfarás!
Preparación del sofrito
Comienza picando finamente la cebolla, el ajo y el pimiento verde. En una sartén grande, calienta un poco de aceite de oliva y añade los ingredientes picados. Sofríelos a fuego medio hasta que estén tiernos y dorados. ¡No te olvides de remover de vez en cuando para evitar que se quemen!
Cocción de los tomates
Agrega los tomates pelados y sin semillas a la sartén. Cocina a fuego lento durante unos 15 minutos, o hasta que los tomates estén bien hechos y hayan soltado su jugo. Si quieres darle un toque de sabor extra, puedes añadir una pizca de azúcar para contrarrestar la acidez de los tomates.
Incorporación de las ñoras y los pimientos choriceros
Incorpora las ñoras y los pimientos choriceros, previamente hidratados y picados, a la sartén. Cocina durante unos minutos más para que se integren bien con el resto de ingredientes. Recuerda remover con frecuencia para evitar que se peguen al fondo.
Triturado y cocción final
Tritura todos los ingredientes con una batidora o un procesador de alimentos hasta obtener una salsa suave y fina. Vuelve a llevarla a ebullición y cocina unos minutos más para que espese ligeramente. ¡Prueba la salsa y ajusta el sabor según tus preferencias!
Cocción de las albóndigas en la salsa
Una vez que las albóndigas estén listas y la salsa haya espesado, es hora de combinarlos para obtener un plato delicioso. Aquí tienes algunos consejos a tener en cuenta para cocinar las albóndigas en la salsa de manera exitosa:
- No sobrecargues la sartén. Para evitar que se peguen o rompan, no sobrecargues la sartén. Cocínalas en tandas si es necesario, y asegúrate de que estén bien espaciadas para que se doren uniformemente.
- Fríe suavemente. Antes de añadirlas a la salsa, dora las albóndigas ligeramente en una sartén con un poco de aceite para sellar los jugos y añadir un toque crujiente. Escucha el chisporroteo de la sartén y el aroma del bacalao y el ajo tostándose para saber que están listas.
- Añade a la salsa. Una vez doradas, añádelas a la salsa y cocínalas a fuego lento durante unos minutos para que se impregnen del sabor y se terminen de cocinar. La salsa se vuelve más espesa y brillante alrededor de ellas.
- No remuevas demasiado. Para evitar que las albóndigas se rompan, no las remuevas demasiado una vez que estén dentro. Déjalas cocinar a fuego lento y suavemente, y disfruta del olor a tomate, cebolla y pimentón que se esparce por la cocina.
Receta
Albóndigas de bacalao a la vizcaína
Tiempo de preparación: 45 minutos
Saborea la auténtica cocina vasca con esta receta de albóndigas de bacalao a la vizcaína.
Ingredientes
- 500 g de bacalao desalado
- 150 g de pan rallado casero
- 2 huevos de corral
- 2 dientes de ajo
- 1 manojo de perejil fresco
- 2 tomates maduros
- 1 cebolla
- 2 ñoras
- 100 ml de aceite de oliva virgen extra
- Sal al gusto
Instrucciones paso a paso
- Comienza rehidratando el bacalao en agua fría durante 24 horas, cambiando el agua cada 8 horas. Una vez rehidratado, desmiga con los dedos.
- En un bol, mezcla el bacalao desmenuzado, el pan rallado, los huevos, el ajo picado y el perejil finamente picado. Sazona al gusto y forma las albóndigas con las manos.
- Para la salsa vizcaína, prepara un sofrito con la cebolla y los tomates picados en una sartén con aceite de oliva. Añade las ñoras previamente hidratadas y picadas.
- Incorpora las albóndigas a la sartén con el sofrito y cocina a fuego lento durante 15 minutos, hasta que estén doradas y la salsa haya espesado.
Notas:
- Si no encuentras ñoras, puedes sustituirlas por pimientos choriceros o pimentón dulce.
- Sirve las albóndigas a la vizcaína con arroz blanco o patatas cocidas.
- Guárdalas en un recipiente hermético en el frigorífico hasta 3 días.